Miguel Rubio Artiaga

En Nochebuena
¡Siente un pobre
en su mesa!
Los alquilo
de todos los colores
razas y tamaños.
Desde el medio pobre
hasta el pobre entero,
y por un precio
razonable,
le puedo conseguir
un auténtico
miserable.
Los vagabundos
e indigentes
por exceso
de almacenaje,
los alquilo en grupo.
Hoy, le aconsejo
que se lleve
una docena
de niños de la calle
solo le cobro seis
están de oferta.
Si son árabes
como no creen
en Jesusito,
ni falta hace
que los vean
sus amigos
hasta después
de la cena.
Con el café y la copa
quedan muy bien
y los efluvios ebrios,
convierten
en estas fechas
tan especiales
a los mas racistas
en liberales.
Este año,
se llevan mucho
y es novedad,
ya,no solo
los ancianos.
Le puedo alquilar
sin Iva, bajo mano,
y a precio de coste,
familias enteras
de blancos
pura sangre del país
y papeles garantizando,
venir de familias
de viejos cristianos.
¡Apenas el doble
que una de gitanos!
Dan menos juego
por lo del baile
y demás,
pero quedan muy bien
y son mas educados.
Y lloraba la roca dura
y la montaña vieja
lloraba.
Y gemía la tierra,
se apagaba
el fuego,
ardía el agua.
La libertad
lloraba sangre
con lágrimas esclavas.
Lloraba la tristeza,
todo lo humano
y lo que no lo era.
¡Lloraba la vida entera!
En Nochebuena
¡Limpie su conciencia!
¡Siente un pobre
en su mesa!