José Pastor González

ciento sesenta y siete días sin ti
y todavía no te he olvidado
todos los días te imagino te recuerdo te extraño te vislumbro
y creo verte
en una fotografía en un banco del parque en una mirada en una espalda en unos andares en una risa en un libro en una canción de Extremoduro
en un olor en una blusa en un paisaje de montaña en unos labios carnosos en un hermoso culo
y tu voz sobreviviéndote en el contestador automático de tu teléfono móvil
ciento sesenta y siete días
y no quieres irte de mis sueños
y no quieres irte de mis pesadillas
y no quiero dejarte ir
ciento sesenta y siete días
diez mil veinte minutos
eternos y vacíos
como la vida
ciento sesenta y siete días
en que echaste a volar
en caída
libre
como una piedra
[y me dejaste
solo
con tu ausencia]