Francisco José Segovia Ramos

Vampiros en España, hay que decirlo, nació como otra apuesta más de Alberto López Aroca iniciada en las redes sociales, en las que informó sobre su proyecto sobre la historia de los vampiros en España en el ámbito literario. Tuvo gran acogida y, pocos meses después, el proyecto vio la luz bajo este atrayente título.

Vampiros en España es una amalgama de anotaciones, relatos, poesía y artículos, amén de una serie de imágenes que los acompañan. Muchos de estos contenidos eran inéditos en castellano hasta su traducción y publicación. Una labor ingente y muy bien trabajada.

En esta obra nos vamos a encontrar, además de notas del autor mordaces, ácidas, divertidas y lúdicas a partes iguales, textos de autores tan reconocidos como Walter Scott, Emilia Pardo Bazán, Jan Neruda y Charles Nodier, además de referencias a otros muchos literatos célebres y no tan conocidos por el común de los mortales.

La historia de Vampiros en España va desde los primeros textos que recogen el término vampiro, hasta el culmen del fenómeno, la publicación del Drácula de Stoker en 1897 y su posterior traducción y publicación en España, sin obviar cómo la figura del vampiro ha llegado al teatro y al cine, e incluso ha pasado de ser un icono gótico a convertirse en un amenaza cósmica.

En definitiva, Vampiros en España se convierte en un tratado imprescindible para entender cómo un fenómeno tradicional de Europa del Norte y los países eslavos se extendió al resto del mundo, la Península Ibérica incluida, y cómo ha cambiado la figura del vampiro, desde los primeros y elementales individuos sedientos de sangre hasta el gran Conde Drácula, invención literaria con una amplia tradición detrás que la sustenta.