Lala González

The Ninth Wave (1850)-Ivan Aivazovsky
Reunida con mis demonios
con esos que dictan cada palabra en mi cuerpo
cada palpitar intenso que hace de mí una mujer
un deseo
pienso
Ángeles caídos del cielo
o salidos del infierno
(quién sabe si es lo mismo)
que a la hora de mirarme
sus lenguas tocan mi piel
sus ojos no dejan de manosear mi mente con sus ideas de pasión y muerte
pues estas
si son lo mismo
He llegado a pensar que no existe cielo ni infierno
que estos son solo otra invención del hombre
para mantenernos atadas a sus ideas macabras
si supieran que de nuestra fruta
según una de esas historias
nacieron todos los males de la memoria
aquí, esperando el café
me sonrío con un nudo de llanto en el cuello
¿qué diría Frida si me viera en este tormento?
¿me amaría Anjelamaría al verme tan débil en estos momentos?
¿besaría mi lengua la Pizarnik viéndome decaída
y hasta sin luz?
¿qué diría Julia si me encontrara fuera de mi ruta?
¡Ah! Es que por momentos soy una simple mujer
y me entrego libremente a mis tormentos
una poeta con alma de guadaña inquieta
que en otros quisiera morir
en medio de la tormenta