José Pastor González

pueblos deshabitados donde todavía celebran el magosto con castañas orujo y queimada
pueblos donde el alcalde deja a la mitad una partida de mus para enseñar la iglesia a unos turistas
pueblos donde a huebra retejan un viejo molino
pueblos donde los desertores del arao son un grupo de rock
pueblos donde una anciana sentada en el tejado de la iglesia, armada con piedras y una vara, defiende las campanas que quiere llevarse el obispado a un lugar más seguro
pueblos donde un grupo de teatro lleva sus teatrocidades por toda la comarca
pueblos donde la recuperación de la memoria histórica es algo personal y colectivo
pueblos donde un mesón que fue las antiguas escuelas hace pizzas al horno de leña para que no nos falte de nada
pueblos donde dejan fumar en los bares
pueblos donde una zapatería por las noches es un ateneo libertario
pueblos donde las huertas son toda una declaración de resistencia
pueblos donde todos los primeros lunes de cada mes se manifiestan para que no les cierren la escuela
pueblos donde una biblioteca municipal abre todas las tardes de lunes a jueves y todas las tardes de lunes a jueves se convierten en una fiesta
pueblos donde el equipo de fútbol lo integran un pastor, un herrero, un acequiero, una maestra de escuela, un panadero y su hijo, dos albañiles, dos vecinos del pueblo de al lado, un rumano que llegó para la vendimia y un marroquí que quiere montar un bar
pueblos que sabotean los motores de los bulldozers que van a arrasar un bosque de carballos
pueblos donde te llevan a las bodegas a beber vino y a merendar y de donde no te quieres marchar
pueblos donde la gente es lo más importante
y que hacen que la vida
sea más fácil divertida
y hermosa