Rakel Raro

Le blanchisseur (1884-1888)-Henri de Toulouse Lautrec
Y el frío
metido hasta los huesos
sin sentir:
ni pena ni dolor ni rabia.
Frío nada más
un intenso frío adentro
y la necesidad de sobrevivir
en tierra de nadie
helada y hostil.
Luchando por sobrevivir
aunque no sepas
para qué.
Pero tú sigues
levantando la cabeza…
Ahí la tienes:
¡mírame! al menos, mírame…
