Fernando Morote

Velocità di motoscafo (1919-1924)-Benedetta Cappa Marinetti
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Camino hasta la mitad del espigón. Avanzo entre gaviotas y patos. La brisa despeina mi cabellera. El fresco matutino me sacude los huesos. Me detengo para observar el mar. El movimiento del agua me relaja. El golpe de las olas contra las rocas me conmueve. El olor de las algas me despierta el apetito. Suelto algunas palabras. Entablo una conversación. Escucho la respuesta silenciosa. Sin esfuerzo alguno, recibo la dirección que vengo a buscar. En ese intercambio íntimo, la aparente inmensidad de mis desafíos cotidianos se convierte en una simple banalidad.
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