Fernando Morote

Il ciclista (1916)-Mario Sironi
53
No sólo las carreteras son un peligro. Para mí resultan peores los ancianos en bicicleta, los gordos en moto y los mocosos en patines. Todos creen ser los únicos en la pista. Una mañana arrollé a uno de ellos. Fue tan intempestiva su aparición enfrente de mi capó que no pude frenar ni esquivarlo. Lo aventé contra un poste de luz. Cuando llegó la policía, me declaré inocente. El oficial insistió en imputarme una negligencia que no había cometido. ¿Atribuirme la culpa por una estupidez ajena? Sostuve firme mi posición. Al final la multa cayó sobre el infractor. El que la hace, la paga.
—


