Magdalena Uncal

Cuando la casa está vacía
deja de ser casa.
Hay vacío, ni siquiera aire.
Me mueve una inmensa tristeza.
Mi cuerpo tiembla
y las sombras llenan mi cabeza:
perderte.
Magdalena Uncal

Cuando la casa está vacía
deja de ser casa.
Hay vacío, ni siquiera aire.
Me mueve una inmensa tristeza.
Mi cuerpo tiembla
y las sombras llenan mi cabeza:
perderte.