LA VIDA EN MICRO (efectos de una averración salbaje) (LVII)

Fernando Morote

Treno In Corsa (1922) -Ivo Pannaggi





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En los bares ocupaba el lugar de honor: le llamaban “el trono del parapléjico”. Sus amigos se desvivían por atenderlo. El accidente que sufrió en la piscina del club, mientras saltaba del trampolín, le confirió una jerarquía inesperada entre los miembros del grupo. Le cedían los bocaditos más sabrosos y le servían los mejores tragos. Cuando ellos se jactaban de conquistas femeninas, hazañas sexuales e infidelidades exitosas, él se limitaba a escuchar. Al final de la noche, ya en casa, despojado de la prótesis y fuera de la silla de ruedas, fornicaba a sus preferidos.




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