Miguel Rubio Artiaga

Espejo lleno de trampas,
de imágenes fariseas,
donde las muertes negras
por mor de su embrujo
se convierten en tumbas blancas.
Espejo de hechizos lentos,
enmarcado en pobre madera,
de linaje humilde
y mentiras verdaderas.
Mundo al revés
donde la izquierda es la derecha
y el pasar de antiguos futuros
lo ha picoteado con el robiznar
del óxido y sus manchas cenicientas.
Espejo reflactario de soles,
volteador de siluetas,
el trampolín involuntario
de sombras pasajeras.
Holograma invertido,
hermano mellizo enfrentado,
lienzo quieto de imágenes quietas,
autorretrato implacable,
acusador inclemente,
gris bronce, pintado de acuarela.
El Espejo,el pintor de los mágicos pinceles.
El guardián del color por inventar
y el notario de todos los inventados
Del girasol el amarillo,
el naranja de la naranja,
el blanco de la cal,
el negro del luto,
el verde de la esmeralda,
el terciopelo rojo de la rosa,
el transparente de lo invisible,
la bandera osaria de los piratas,
el azul del lazo de un niña,
el bronceado nobiliario del oro,
el color, aún ni soñado, de la nada.
Hay veces en que pienso si los espejos,
tendrán alma.
