Alberto Ernesto Feldman
Inés es una mujer felizmente casada, madre de dos hijos y abuela de cuatro nietos. Su esposo, el compañero de toda su vida, es un jubilado calmo y comprensivo, respetuoso del secreto que su mujer guarda en el cajón de su mesita de luz; el pequeño diccionario, recuerdo de su primer amor, el amor de sus dieciséis años; ese muchacho rubio y buen mozo que apenas hablaba castellano y que conoció en los Carnavales de 1960 en el club Municipalidad.
En la segunda vez que se encontraron, él le regaló el diccionario; quería que ella le dijese no solamente ¡te quiero!…, quería oír también “¡Ich liebe dich!…”.
Inés adora a su esposo y a su familia, y es adorada por ellos, pero no puede ni quiere olvidar su propia historia; después de todo, conoció el Amor de la mano de Hans, el muchachito que había pasado su infancia y perdido toda su familia en el infierno de la Segunda Guerra Mundial y que, luego de la tercera cita, murió en un estúpido accidente de tránsito, en un tranquilo barrio de Buenos Aires, cruzando distraídamente la esquina de la casa de ella, que abrazada al pequeño diccionario y dormía plácidamente en la cama que tenía todavía el calor y el olor de él.
