Roberto Yagüe
En Madrid no es necesario hacer caso de la crítica teatral para poder ver teatro a cualquier hora y en cualquier lugar.
Hoy tengo delante de mí un hombre oriental cuya camisa, zapatillas y rosario van unidos en comunión. Mientras la que debe ser su novia no para de gritarle en un idioma cada vez más apreciado por su valor económico, éste reza en paz, y de manera muy precisa, cada una de las cuentas que un rosario contiene. Una vez rezada la cuenta, se santigua como es debido y besa el Cristo. Así el proceso se repite una y otra vez en un momento de onanismo tan interesante, que no me doy cuenta de que me he pasado de parada.
Lejos de reírme admiro momento tan glorioso, pues siempre he valorado la gente de fe que encuentra paz y sosiego en objeto tan simple. Aún así, los rosarios ya no están de moda, así que no podré buscar ese consuelo como regalo de cualquier revista. Y es que el mercado ofrece lo que el público demanda. O al menos esa es la teoría perfecta del neoliberalismo. Y si no, miren y admiren ese anuncio maravilloso adaptado plenamente a las últimas corrientes de pensamiento global. Telefónica trata de recoger el espíritu asambleario del 15M, que tan buena acogida ha tenido en un altísimo porcentaje de gente, mostrando un grupo de personas debatiendo (que no rezando) y eligiendo las ofertas que deberían tener. Maravilloso mercado que siempre está ahí ayudando y observando lo que los ciudadanos quieren.
¿Pues no resulta que ahora se han hecho eco de cuatro ecologistas que pretenden una vida sana y unos pulmones limpios? Habrase visto que desfachatez. Los productos ecológicos no funcionan señores fabricantes. Lo que realmente queremos es que el cambio climático nos permita tener un acueducto de diciembre dorado por un sol de Agosto. Queremos disfrutar de la canción del verano los 12 meses del año. Queremos que King África y Georgie Dann desarrollen su creatividad con contrato fijo.
Por eso os animo a todos a poner de moda el verano. A coger el coche hasta para comprar el pan, a no reciclar, a quemar todo árbol que moleste en nuestro camino hacia la vivienda digna, propia o especulativa. Entre todos podemos parar esta cadena horrible, monótona y anticuada de las estaciones. Las futuras generaciones nos lo agradecerán, ya que se encontrarán con un planeta completamente transformado, con temperaturas de hasta 15 grados superiores…. Mmmm ¿no es maravilloso no tener que pagar calefacción?
Si por el camino se encuentra con algún perro-flauta que le importune en su labor no hay de qué preocuparse. Dígale que incluso si todas las emisiones se eliminaran hoy, las temperaturas globales declinarían muy lentamente, en un período de mil años. Esto le provocará una terrible depresión y acabará ocupando algún inmueble. Esto tampoco debe preocuparles, ya que con un gobierno fuerte y decidido, rápidamente ese inmueble se reforma y tenemos un Mc Donalds o un Zara, dando así empleo a esta juventud que no tiene coche para contaminar ni rosario para rezar.
Así pues, sigamos así. Disfrutemos contaminando y apoyando políticas basadas en primos. Vivamos siempre en AGOSTO.
AGOSTO
El miércoles 7 de diciembre el Centro Dramático Nacional estrena en el Teatro Valle Inclán ((Pza. de Lavapiés s/n) el espectáculo “Agosto (Condado de Osage)”, de Tracy Letts, dirigido por Gerardo Vera, con versión de Luis García Montero e interpretado, entre otros, por Amparo Baró, Carmen Machi, Irene Escolar, Alicia Borrachero, Clara Sanchis y Sonsoles Benedicto.
La obra de Tracy Letts, Agosto: Condado de Osage fue saludada por el New York Times como «… la nueva obra americana más apasionante que Broadway ha visto en años». Recibió el premio Pulitzer de Teatro en 2008. Se estrenó el 28 de junio de 2007 en el Steppenwolf Theatre de Chicago y posteriormente se representó con enorme éxito en dos teatros de Broadway, dirigida por Anna D. Shapiro, con un total de 648 representaciones. Obtuvo el número 1 en la lista de «Diez espectáculos más destacados» de la revista Time en 2007, año en el que además obtuvo cinco premios Tony, incluido el de mejor obra del año y mejor director (AnnaD.Shapiro).En la obra, calificada como «comedia de humor negro» y ambientada en una gran mansión en las afueras de Pawhuska, Oklahoma, una familia se enfrenta con su pasado y su presente.
Amparo Baró regresa a los escenarios tras 11 años sin subirse a las tablas. Dijo no volver a subirse hasta que Carmen Machi le acompañara y ahora por fin tenemos la oportunidad de verlas juntas en escena bajo las órdenes de Gerardo Vera.
Centro Dramático Nacional. Sala Valle-Inclán
Hasta el 19 de Febrero
Hasta el 19 de Febrero
MACBETH
La obra de Shakespeare, poliédrica y excepcional, tiene múltiples interpretaciones, y eso es una de las características que “solo se pueden permitir los grandes como Bach, Tiziano, o Velázquez”.
Cinismo, pasión, poder, ambición. Todos estos calificativos se aúnan en la obra de Shakespeare Macbeth. Esta vez es Helena Pimenta la directora que esta temporada se ha atrevido con el texto, como adecuada reflexión para el mundo contemporáneo, en el que el hombre se ve empujado por la sociedad a conseguir logros a toda costa. Es por tanto una nueva mirada, necesariamente profunda, sobre la historia de este héroe convertido en villano que es Macbeth.
La siempre poderosa palabra shakespeariana se alía, en esta ocasión, con composiciones de la ópera de Verdi del mismo título, interpretadas por el Coro de Voces Graves de Madrid y con otros temas creados por Iñaki Salvador, en un diálogo que contribuirá a dar cuenta del contraste de atmósferas, emociones y sentimientos que pueblan esta magnífica obra.
Helena Pimenta, directora de la Compañía Nacional de Teatro Clásico versiona y dirige esta nueva propuesta que cuenta con la utilización del 3D en su escenografía. El resultado es una combinación de las nuevas tecnologías con los recursos clásicos, una fusión de imágenes ficticias con la interpretación teatral.
La estética de este montaje se traslada a la I Guerra Mundial, una decisión que explica Pimenta: «Situarlo en la Edad Media era quizás más propio del cine y pensamos que los años 20 era una época más análoga al espectador actual, por lo que supuso de cambio de mentalidad».
Teatros del Canal. Sala Verde
Hasta el 18 de Diciembre
Hasta el 18 de Diciembre
LOS OJOS
¿Y si volver a ver, lo más deseado por alguien, pudiera implicar la desgracia para otra persona? «Los ojos», la obra de Pablo Messiez que estrena esta semana el Teatro Fernán-Gómez, se hace esta pregunta, la misma que Benito Pérez-Galdós planteó en su Marianela. De hecho en este relato se ha inspirado libremente Messiez para crear su segundo montaje. Anteriormente estrenó “Muda”, que estuvo dos semanas en cartel en la sala Pradillo.
Una chica enamorada. Un chico ciego de nacimiento. Marianela y Pablo. Un ciego que nunca vio pero que reconoce el mundo por sus texturas, voces, olores y sabores. Una oftalmóloga de la capital que jura poder hacer el milagro: devolverle la vista. Pablo y Chabuca.La madre, la hija, los enamorados y la oftalmóloga protagonizan un melodrama construido sobre la búsqueda de un lugar en el mundo, la fragilidad de las relaciones y la capacidad esclarecedora de la distancia. Sobre el amor, la tierra y la vista. O sobre la falta de cualquiera de las tres cosas.
Teatro Fernán Gómez
Hasta el 18 de Diciembre
Hasta el 18 de Diciembre
